LA POLITICA
El autor es Miembro del Directorio Nacional del PRSC, Miembro de la Comisión Política de la JRSC, Magíster en Administración de Empresas y Catedrático Universitario.
Al momento de tomar la decisión de involucrarme activamente en el partido político al que desde niño admiré, por muchas razones, dos de ellas en especial, como fueron el magnífico liderazgo de su presidente y mentor y sus obras de gobierno, las cuales hoy por hoy son los erarios que exhibe esa institución, pilar de la democracia dominicana, recibí muchos cuestionamientos de parte de mis amigos e incluso de mi familia, sobre el particular, sin embargo desde entonces mi respuesta fue la misma del día de hoy “La política no es mala, la política no es sucia, esos adjetivos, mas bien son propiedad de los políticos, es decir, los que ejercen la política”.
Mantengo es a dicción y cada día se manifiesta más con el resquebrajamiento de la clase, y es que la mayoría de personas que llegan a ocupar significativos cargos, no se ocupan de otra cosa más que de enriquecerse, ayudar a los más cercanos y olvidarse del pueblo que los eligió, hace algunos meses el prestigioso y distinguido periodista Adriano Miguel Tejada escribió un artículo al que tituló “La Clase Política”, artículo éste que describe con total luminiscencia las consecuencias de los hechos desafortunados, realizados por los políticos de los últimos años.
El Partido Reformista Social Cristiano, el partido de Balaguer, es fiel reflejo de esos hechos desafortunados y la ambición desmedida de poder de algunos de sus altos “líderes”, los cuales sólo se han ocupado de promover la institucionalidad y el relanzamiento del partido para sacar provecho personal y en nada les interesa que su partido vuelva al poder, para desde ese lugar gobernar a favor de los más necesitado, sin que necesariamente esto perjudique a los que no son necesitados.
Esos “dirigentes” del partido reformista sólo les interesa tener una franquicia con el nombre del PRSC, pues en nada aplican el eslogan “Ni injusticia, Ni privilegios”, sólo quieren tener los derechos legales para con ellos mercadear y hacerse más y más ricos, sin atañerles que la patria les exige hacer algo más que eso. Ellos una vez se juramentaron y juramentaron a otros y en esos juramentos se dijo una frase final “de no ser así que DIOS y la sociedad se los tome en cuenta”, por mi parte yo espero que así sea…
Contunuará…
Al momento de tomar la decisión de involucrarme activamente en el partido político al que desde niño admiré, por muchas razones, dos de ellas en especial, como fueron el magnífico liderazgo de su presidente y mentor y sus obras de gobierno, las cuales hoy por hoy son los erarios que exhibe esa institución, pilar de la democracia dominicana, recibí muchos cuestionamientos de parte de mis amigos e incluso de mi familia, sobre el particular, sin embargo desde entonces mi respuesta fue la misma del día de hoy “La política no es mala, la política no es sucia, esos adjetivos, mas bien son propiedad de los políticos, es decir, los que ejercen la política”.
Mantengo es a dicción y cada día se manifiesta más con el resquebrajamiento de la clase, y es que la mayoría de personas que llegan a ocupar significativos cargos, no se ocupan de otra cosa más que de enriquecerse, ayudar a los más cercanos y olvidarse del pueblo que los eligió, hace algunos meses el prestigioso y distinguido periodista Adriano Miguel Tejada escribió un artículo al que tituló “La Clase Política”, artículo éste que describe con total luminiscencia las consecuencias de los hechos desafortunados, realizados por los políticos de los últimos años.
El Partido Reformista Social Cristiano, el partido de Balaguer, es fiel reflejo de esos hechos desafortunados y la ambición desmedida de poder de algunos de sus altos “líderes”, los cuales sólo se han ocupado de promover la institucionalidad y el relanzamiento del partido para sacar provecho personal y en nada les interesa que su partido vuelva al poder, para desde ese lugar gobernar a favor de los más necesitado, sin que necesariamente esto perjudique a los que no son necesitados.
Esos “dirigentes” del partido reformista sólo les interesa tener una franquicia con el nombre del PRSC, pues en nada aplican el eslogan “Ni injusticia, Ni privilegios”, sólo quieren tener los derechos legales para con ellos mercadear y hacerse más y más ricos, sin atañerles que la patria les exige hacer algo más que eso. Ellos una vez se juramentaron y juramentaron a otros y en esos juramentos se dijo una frase final “de no ser así que DIOS y la sociedad se los tome en cuenta”, por mi parte yo espero que así sea…
Contunuará…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario